Las instalaciones del hotel son muy buenas. Las habitaciones son limpias y bonitas, con una vista impresionante. El personal es amable y atento. El desayuno gratuito es delicioso y suficiente.

No me puedo quejar de nada.

El lugar presenta muchas alternativas para realizar actividades, es un lugar hermoso por la naturaleza

Los desechos tanto de alimentos como de escombros no son bien manejados

El lugar es espectacular, con amplias cabañas, varias opciones de restaurantes y actividades para realizar. El personal es amable y atento, y las termas son preciosas.

Me sentí completamente relajado, no tengo ninguna razón para quejarme.

Me fascinó las actividades que se pueden realizar en el hotel. Muy interesantes.

No hay aire acondicionado ni televisor en las habitaciones.

Siempre vuelvo al mismo hotel en Liberia porque la primera vez me ayudaron a buscar transporte. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratis, aparcamiento, transporte al aeropuerto, lavandería, centro de negocios, senderismo. Volveré para Año Nuevo.

Las instalaciones son hermosas, el mirador es espectacular, el desayuno muy bueno y la comida en general son buenas, las actividades complementarias que uno puede hacer en el hotel son muy buenas principalmente el SPA y las aguas termales.

Podrían incluir un servicio con tarifa todo incluido, ya que el hotel se encuentra en un lugar donde no hay nada cerca, por lo que queda limitado a utilizar el restaurante del hotel. Ademas podrían incluir en las habitaciones una mini refrigeradora.

Las actividades ofrecidas, como los tours en canopy, paseos a caballo y visitas a las aguas termales, te harán sentir como si estuvieras en una película de aventuras llena de adrenalina. ¡Una experiencia única!

Las carreteras de acceso pueden ser un poco difíciles, con huecos y grandes grietas.

Las termas.

No me gustó casi nada. La comida era malisima, el estado de las instalaciones regulares, el servicio pésimo. Uno de los peores alojamientos de todo Costa Rica. Una pena porque veníamos de estancias preciosas y nos arrepentimos de haber cogido este alojamiento.

La habitación era muy acogedora y rústica, con una decoración que te hacía sentir como en casa. Tenía un baño privado con una ducha caliente y productos de aseo de diseñador. El Wi-Fi gratuito fue muy útil para mantenerme conectado. Me encantó también el escritorio y el armario, que me brindaron espacio para trabajar y guardar mis pertenencias. Además, el ventilador en la habitación garantizaba una temperatura agradable. Como viajero con poco dinero, encontrar todas estas comodidades fue un verdadero lujo.

Lo único que menos me gusta fue que el cuarto no tenía un secador de pelo. Sin embargo, entiendo que esta es una opinión subjetiva y que otras personas podrían no encontrarlo un problema.

Hospitalidad del personal. Toures muy buenos.- Vistas espectaculares al golfo.- Muchas cosas que hacer y explorar.- Bajada del tobogán gigante.- Experiencia en el canopy.- Limpieza y orden.- Comida sabrosa y variada.

Nada de verdad.

Excelente experiencia, mi esposa y yo lo disfrutamos mucho. La clase para hacer jabones fue excelente, al igual que el canopy. Fue nuestra segunda luna de miel: renovamos votos matrimoniales.

Todo fue excelente.

Algunas de las actividades programadas

La comida es regular. La atención en el restaurante La Montaña no es buena. Faltan actividades nocturnas. Falta información con horarios para servicios como el bar de piscina y programación de tours

Una gran atención de parte del servicio del hotel. Gran contacto con la naturaleza.

El camino descuidado, una habitación descuidada y falta de demarcaciones

La vista del atardecer es espectacular. El tour a las aguas termales deben realizarlo todos! Hay posibilidad de ver muchos animales, para mi hijo esto fue una maravilla!

El camino para llegar es de lastre, se puede ir en carro bajo, pero hace que sea más lenta la llegada. Las habitaciones no cuentan con televisión. Los puentes colgantes están un poco deteriorados, hay partes donde la maya está un poco suelta. Poca variedad en el buffet, todos los días daban la misma comida. El olor a boñiga en la recepción es desagradable.

Recomendado 100%. El hotel espectacular, la tranquilidad , el ambiente estuvieron perfectos. El personal fabuloso y la comida exquisita. Los cócteles de José en la piscina y en el bar son para no perdérselos. Sugerencia: alquiler de bicicletas. Volveremos